Usos temporales como herramientas urbanas de la ciudadanía
Dentro de la planificación de las ciudades existen múltiples herramientas destinadas a mejorar el desarrollo urbano. Sin embargo, el instrumental habitual se basa en procesos a largo plazo, con una escasa participación de los diversos agentes afectados, y tiene una capacidad reducida de cambio o adaptación a corto plazo[1]. Frente a estas limitaciones, surgen otras iniciativas que buscan responder a necesidades y paradigmas actuales como la participación y la rapidez de respuesta, desde la propia planificación urbana, pero sin recurrir a métodos tradicionales. Entre estas formas de intervención destacan los usos temporales, entendiendo el concepto de uso temporal, no como un suceso que interfiere con la planificación, sino como un proceso que genera un impacto positivo cultural, económico y social en la zona donde se establecen. Esto promueve un mejor desarrollo de la ciudad, y, por ende, trabaja como catalizador urbano[2].
Este tipo de iniciativas presentes en las ciudades, como usos no planificados, revitalizan los lugares donde se implantan y ayudan, en algunos casos, a formalizar actividades permanentes. Sin embargo, frecuentemente estos proyectos informales no son tomados en cuenta y son desplazados, sin importar los resultados que hayan obtenido.
Madrid presenta un amplio catálogo de actividades e iniciativas de esta índole, solares y edificios vacíos o en desuso que se han convertido en focos dentro de la comunidad. Gracias a la autogestión, los ciudadanos y vecinos madrileños tienen la oportunidad de ser agentes en la mejora de su ámbito urbano. Ellos crean, en el proceso, no solo nuevos lugares, sino nuevas comunidades reforzando los lazos de las ya existentes. Estos nuevos recintos al ser contenedores de diversas actividades y usos, funcionan como hitos que terminan reactivando la zona donde se desarrollan, contribuyendo a la mejora de la imagen de esta, así como convirtiéndose en una referencia dentro de la ciudad.
La amplia gama de servicios que se pueden dar en estos lugares, ofrece una nueva oportunidad para que diversos agentes desarrollen sus iniciativas y se den a conocer, dando así al barrio nuevas posibilidades para la creación de trabajos informales y/o no reglados a diversas escalas. Con esta revitalización, se evita el deterioro de los solares e inmuebles dándoles un mantenimiento constante, impulsado por la gestión ciudadana. Dichos ciudadanos adquieren una nueva conciencia del respeto y cuidado hacia el espacio público, ya que ellos son responsables directos de su funcionamiento y éxito.
Viendo todos los beneficios que surgen del éxito de estas iniciativas, surge la pregunta de por qué no tienen una presencia más determinante dentro de la planificación urbana de las ciudades, como herramientas a corto y medio plazo. La aprobación del denominado Marco Común[3], las iniciativas promovidas por el PECAM[4], o los Presupuesto Participativos, demuestra que el Ayuntamiento de Madrid es consciente de los beneficios de los usos temporales autogestionados, no solo a nivel urbano, sino a escala social y cultural. Sin embargo, todavía faltan varios aspectos por resolver, sobre todo en la parte normativa y comunicativa entre usuarios y propietarios, que permitan un mejor desarrollo de los usos temporales.
Muchos de los usos temporales en Madrid se originan por iniciativa de unos vecinos que requieren un espacio para mejorar su entorno. Logran el desarrollo de un lugar que tiene repercusiones positivas en el ámbito cultural, económico y sobre todo social.
Fomentar iniciativas de este tipo, no debería ser algo imposible de planificar. Una posible solución sería establecer procesos y normas que guíen a vecinos y posibles interesados en la reactivación de espacios, durante el período de tiempo que los lugares vayan a permanecer vacantes. Así mismo, la difusión de iniciativas similares que hayan tenido éxito puede servir para fomentar el diálogo y el intercambio de conocimientos, ayudando a visibilizar y dar forma a las posibilidades de los sitios.
A través de la reacción de los ayuntamientos o mediante una mayor difusión de los proyectos en lugares de uso temporal, este fenómeno urbano podría ser incorporado en la planificación de las ciudades, probablemente ligado a una escala temporal y espacial en relación con la mejora barrial.
Más referencias
Abierto_ Ciudad Viva: Espacios vacantes y autogestionados [en línea], La civdad viva, 25 de noviembre 2015, [ref. de 26 de Marzo 2016], Disponible en Web: http://www.laciudadviva.org/blogs/?p=29609
Estudio Urban Catalyst: Urban Catalyst. Strategies for temporary uses–potencial for development of urban residual areas in European metropolies [en línea], cordis.europa.eu, Berlín, [ref. de 10 de enero 2016], Disponible en Web: http://cordis.europa.eu/documents/documentlibrary/65794761EN19.doc
HENTILÄ, H. “Urban Catalyst: estrategias para usos temporales. Potencial de desarrollo de zonas residuales urbanas”, En: Ciudades en (re)construcción: necesidades sociales, transformación y mejora de barrio. Barcelona, Diputació de Barcelona Xarxa de municipis, 2008, p. 79-98.
LEHTOVUORI, L., RUOPPILA, S.: Temporary uses as means of experimental urban planning [en línea], Finlandia, Academia de Artes Universidad de Turku, 1 de abril de 2012, [ref. de 10 de enero 2016], Disponible en Web: https://www.academia.edu/6067024/Temporary_uses_as_means_of_experimental_urban_planning
Todo por la Praxis: 4 dudas sobre la institucionalización de los solares [en línea], ARQUITECTURAS COLECTIVAS, 3 de Diciembre 2012, [ref. de 25 de Marzo 2016], Disponible en Web: https://arquitecturascolectivas.net/noticias/4-dudas-sobre-la-institucionalizacion-de-los-solares
Vacíos Urbanos Autogestionados [en línea], 20 de Febrero 2012, [ref. de 5 de Marzo 2016], Disponible en Web: https://todoporlapraxis.es/027-vacios-urbanos-autogestionados/
TORO, M.: Ojos que no ven, ciudad que no siente [en línea], la civdad viva, 25 de septiembre 2014, [ref. de 27 de Marzo 2016], Disponible en Web: http://www.laciudadviva.org/blogs/?p=25987
[1] OSWALT, P., OVERMEYER, K., MISSELWITZ, P.: Urban Catalyst: The Power of Temporary Use. Berlín, DOM PUBLISHERS, 2014, p. 384.
[2] Según la Real Academia Española:
Catalizador, ra: adj. Dicho de una persona o de una cosa: Que estimulan el desarrollo de un proceso.
Urbano, na: adj. Perteneciente o relativo a la ciudad.
[3] Se refiere al Marco Común elaborado por la Red de Espacios ciudadanos (REC), el cual se basa en normalizar y democratizar los acuerdos para la gestión de espacios ciudadanos, haciéndolos accesibles y transparentes a cualquier comunidad que desee desarrollar nuevas actividades.
[4] Plan Estratégico de Cultura del Ayuntamiento de Madrid 2012-2015 (PECAM) en donde se plantea la oportunidad de realizar cesiones temporales de solares a asociaciones y entidades sin ánimo de lucro, así como propuestas de estrategias para mejorar el paisaje urbano. Un ejemplo de esto es el proyecto de Paisaje Tetuán, impulsado por dicho plan.
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